El Internet de las cosas (IOT) continuará transformando el panorama empresarial y la forma en que vivimos. La computación en la nube es la columna vertebral de esta transformación. La mayor adopción de la nube ha actuado como un trampolín para muchas aplicaciones de IoT y modelos comerciales, ofreciendo la capacidad para las empresas.

Nuestro mundo ha pasado por tres revoluciones industriales significativas. La primera, mecánica, nos dejó la producción en masa. La segunda se basó en la electricidad y la última, la automación, que tuvo como base la tecnología de información. La industria 4.0 se podría referir a una cuarta revolución: un conjunto de tecnologías que posibilitan fusionar los mundos físico, digital y biológico.

Las tecnologías basadas en la nube y los modelos de servicio están cambiando la forma en que las empresas hacen negocios e impulsan la innovación. Básicamente, existen tres categorías principales de servicios de computación en la nube: Infraestructura como servicio (IaaS), software como servicio (SaaS) y plataforma como servicio (PaaS).

A pesar de tener un aspecto exterior idéntico, las características y la funcionalidad que ofrecen las tarjetas SIM normales para teléfonos que suelen ofrecer los operadores de red orientados al consumidor, difieren enormemente en comparación con las tarjetas SIM IOT, que se adaptan mejor a los casos de uso de negocios.